Entre otros desafíos se pueden identificar tres importantes problemas comunes a las naciones modernas. Uno tiene que ver con la dimensión económica, se remite a las formas y relaciones que regulan los intercambios que influyen directamente en el nivel de vida material de la población; el otro nos refiere a los procesos y mecanismos mediante los cuales las personas, los grupos y organizaciones intervienen en la toma de decisiones sobre los temas que les afectan -a nivel societal, regional, grupal, local y comunitario-. Ambos se mueven en la superficie, uno comunicándose con el dinero y el otro a través del poder. El tercero nos remite a características del ambiente en el cual las mencionadas dimensiones operan, es decir: los medios societalmente disponibles, demarcados por los estilos culturales que identifican un país y sus componentes humanos y sociales.
Arnold, M. (1991). Antropología social aplicada en organizaciones económicas y participacionales. Revista Chilena De Antropología, (10). Recuperado a partir de https://revistateoriadelarte.uchile.cl/index.php/RCA/article/view/17684